¿Puede mi bebé dormir boca abajo?
por Eva Téllez

Una más de entre todas las dudas que nos surgen una vez que nos convertimos en padres. En torno a los 3 o 4 meses algunos bebés empiezan a darse la vuelta. Además, se nota ya su preferencia a la hora de dormir, bien hacia uno u otro lado e incluso boca abajo.

Te puedes empeñar en recolocar y cambiar a tu bebé sobre su espalda varias veces, pero al cabo de un rato cuando vuelvas a mirar verás a tu peque en una posición distinta, incluso boca abajo.

Es aquí donde nos saltan todas las alarmas por el Síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) y esa asociación que tiene con dormir boca abajo. Sigue leyendo y veremos si sales de dudas. Por cierto, ten en cuenta que los volteos pueden aparecer y desarrollarse de los 4 a 7 meses.

¿Qué hacer si mi bebé prefiere dormir boca abajo?

Según el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EEUU sobre las posiciones para dormir de los bebés:

“Los estudios muestran que durante la primera infancia, es raro que un bebé que se coloca en la posición de dormir boca arriba se dé la vuelta sobre su estómago. Sin embargo, una vez que los bebés avanzan en su desarrollo, a menudo se dan la vuelta por sí mismos. En esta situación, cuando los bebés se dan la vuelta por sí solos, no hay evidencia de que necesiten ser reposicionados”.

Sin embargo, el grupo de trabajo sobre el Síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL en español, SIDS en inglés) de la Academia Estadounidense de Pediatría (AAP) publicó lo siguiente en Pediatrics en 2011:

“Los padres y cuidadores suelen estar preocupados por la estrategia adecuada para los bebés que han aprendido a darse la vuelta, lo que generalmente ocurre entre los 4 y los 6 meses de edad. A medida que los bebés maduran, es más probable que rueden”.

“En un estudio, el 6 % y el 12 % de los lactantes de 16 a 23 semanas de edad colocados boca arriba o de costado, respectivamente, se encontraron boca abajo tiempo después.

Entre los bebés de 24 semanas o más, el 14 % de los que se colocaron boca arriba y el 18% de los que se colocaron de costado se encontraron en posición prona (boca abajo)”.

“Recolocar al bebé dormido a tumbado boca arriba, puede ser perturbador y podría desalentar el uso de la posición supina por completo. Aunque faltan datos para hacer recomendaciones específicas sobre cuándo es seguro que los bebés duerman en posición prona, la AAP recomienda que estos bebés continúen en posición supina hasta el año de edad. Si el bebé puede rodar de supino a prono y de prono a supino, se le puede permitir que permanezca en la posición para dormir que asume”.

Sin embargo, no hay información sobre un bebé que pueda voltearse de boca arriba a boca abajo, y aún no pueda de boca abajo a boca arriba. Si ese es tu caso debes consultar con el pediatra.

En resumen, la conclusión que obtenemos de estas fuentes expertas es que siempre debes colocar a tu bebé boca arriba para dormir. Una vez que el peque pueda moverse, permite que pueda dormir en cualquier posición que adopte. Simplemente, revisa la cuna o cama donde duerme: mantén el colchón firme, la sábana ajustada, superficie libre de objetos y juguetes, solo tu bebé debe estar en el colchón.

Si quieres consultar la versión revisada en julio de 2022 de la AAP sobre este tema lo puedes hacer aquí.

En ningún caso, este artículo sustituye las recomendaciones de tu pediatra que conoce a tu bebé y las circunstancias particulares de su caso.

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Eva Téllez Terapeuta Ocupacional
Atiendo a peques que presentan retos a nivel motor, sensorial, de desarrollo socioemocional y académico. Mi intervención está basada en el juego así, adquieren herramientas para enfrentarse sus desafíos.
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